Los departamentos que muestran una alta diversificación son San Salvador y La Libertad que se encuentran ubicados en una región central. Se destaca que el Área Metropolitana de San Salvador, contempla 14 municipios de los departamentos de San Salvador y La Libertad, en los cuáles se concentran una parte muy alta de la fuerza laboral, de los sectores productivos más importantes y la mayor disposición de servicios públicos. Esta área cuenta con una amplia red de carreteras de interconexión, pero entre San Salvador y La Libertad existe una interconexión de 3 carreteras a cuatro carriles, en las que se desarrollan las principales actividades industriales y de servicios. Cabe señalar que entre ambos departamentos, llegan a representar más del 60% de la actividad en seis sectores del país, en tres sectores arriba del 50%, y en 6 sectores arriba de 40%. Estos departamentos gozan de una excelente interconexión a 4 carriles, que les permite acceder al Aeropuerto Internacional, Puerto La Unión, a las fronteras de los principales socios comerciales de la región (Guatemala y Honduras).
El departamento de San Miguel junto con los departamentos de la región son La Unión, Morazán y Usulután conforme el eje oriental del país. Esta región presenta mega proyectos regionales que se impulsaron, como la carretera longitudinal del norte y la construcción de Puerto La Unión, que impulsaron el desarrollo logístico de la región. En el caso de San Miguel cuenta con empresas en todas las actividades productivas, destacando a nivel nacional los servicios de salud 11.1%, actividades profesionales 9.9%, financieras 9.1%, industriales 7.7%, recreativas 7.6%, entre otras.
Por otra parte, también se destacan otras actividades con potencial agroindustrial (actividades agrícolas aprovechando el potencial de riego del Río Grande), como actividades pecuarias, y acuícolas por medio del cultivo de peces u ostras del pacífico. Finalmente, existe potencial turístico, aprovechando la diversidad de tipos de playas (Punta Mango para surfear, el golfo de Fonseca para kayak, bahía de Jiquilisco turismo aventura); el turismo sostenibile mejorando el manejo de cuencas hidrográficas, y tratamiento de aguas servidas; otro de los potenciales, es la generación de energía solar, en la cual ya existen varios proyectos en marcha.
Santa Ana y Sonsonate disponen un grado de diversificación productiva medio alto, ocupando el cuarto y quinto lugar. Ambos departamentos, comparten ciertas características y las diferencias otras. Dentro de las características que comparten, es que sus cabeceras departamentales disponen de conectividad a cuatro carriles con la capital (Santa Ana desde finales de los años setentas y Sonsonate a principios de los noventas), esto las ha convertido en ciudades dormitorios, y con actividades encadenadas a la capital; también ambos departamentos, contemplan áreas importantes de cultivos de exportación café y azúcar, y en Santa Ana existe una exportación moderna agrícolas de esquejes vía aérea, en cambio Sonsonate se caracteriza por su alta producción lechera y con una fuerte industria láctea. Cabe señalar que ambos departamentos están conectados por una carretera directa entre ambas cabeceras, que tiene su explicación por los cultivos de exportación, y cuentan con afluentes de agua, y atractivos turísticos.
En la región central del país se encuentran departamentos con la menor diversificación productiva, los que se clasificaron con las más baja fueron: San Vicente, Chalatenango, Cuscatlán, Cabañas, La Paz, Usulután.
San Vicente se caracteriza por el desarrollo de actividades industriales con procesos más tradicionales como la elaboración de embutidos, dulces típicos y tejidos artesanales. Una de las actividades productivas más importantes es la caña de azúcar contando con el Ingenio Jiboa uno de los mayores productores de azúcar. Por su parte, los departamentos situados con diversificación media baja son Usulután, La Paz y Cabañas. Estos departamentos se destacan una tasa de informalidad al 80% de la PEA; por su parte, las empresas se concentraron en comercio y reparación automotriz, industria, y alojamiento y restaurantes.
Cuscatlán y Chalatenango también registran baja diversificación productiva, pero ambos contribuyen a la generación hidroeléctrica del país, pero reciben limitados ingresos por su contribución al país. Cuscatlán ha empezado a beneficiarse del turismo, ya que Suchitoto se ha convertido en un polo cultural y gastronómico muy atractivo, pero sigue sin contar con industrias tractoras que logren un mayor desempeño. Por su parte, Chalatenango, se encuentra el mayor embalse sobre el río Lempa para la generación de energía hidroeléctrica, lo cual le permite un potencial agrícola en el cual se ha instalado el distrito de riego de Atiocoyo, pero su potencial no está aprovechado.
La Paz presenta una diversificación media baja, sin embargo destacan emprendimientos productivos en diversas ramas, como por ejemplo el aeropuerto internacional con hub aéreo de Centroamérica, que cuenta con una empresa de aeromantenimiento con un potencial para desarrollar un clúster aeronáutico; también cuenta con las playas de Costa del Sol y el estero de Jaltepeque en el cual se desarrollan actividades turísticas; el año pasado se inauguró el parque de generación eléctrica solar más grande de la región, que apoyará a diversificar el departamento: finalmente, cuenta con tres zonas francas en las cuales se concentran las actividades industriales del país. Se hace notar, que alrededor de las zonas francas se han creado grandes centros urbanísticos, que aumenta el tráfico en la carretera del litoral, y actualmente se está ampliando a cuatro carriles desde el aeropuerto internacional hasta su cabecera Zacatecoluca, con el fin de reducir el efecto saturación actual.